El colchón de nuestra cama, la cuna o la recámara de los niños es una pieza clave para nuestro descanso. Sin embargo, ¿hace cuánto que lo  limpiaste de la manera debida? A pesar de pasar sobre nuestro colchón gran parte del día y, con esto, de nuestra vida, poco estamos conscientes del mantenimiento que necesita el colchón y no sólo para cuidar cómo luce, sino también por nuestra salud.

Problemas por un colchón en mal estado

¿Sabías de lo inconveniente que puede resultar para ti tener un colchón sin cuidados?

Problemas de postura

Alergias

Los colchones por lo regular alojan el polvo. Por su gran tamaño no son tan sencillos de lavar, mucho menos por ser un elemento de uso diario, ¿cómo esperar a que esté seco y listo? No obstante, este obstáculo puede ser más nocivo de lo que pensábamos, pues el polvo trae consigo ácaros.

Lastimaduras

Un colchón viejo como bien mencionábamos puede tener resortes rotos que pueden rasgar el forro y ocasionarnos lastimaduras. Muchas veces, esas roturas se deben a un mal manejo del colchón o realizar actividades de juegos (como saltar sobre ellos).

Y así la lista puede continuar sobre los múltiples problemas que un colchón en mal estado puede ocasionarnos.

Mantenimiento del colchón

Si tu colchón está a la vista en mal estado o tiene más de 10 años de uso, se recomienda su inminente cambio. Por el contrario, aún cuando el colchón sea de reciente adquisición, su mantenimiento es muy importante.

Como recomendación, siempre utiliza una cubierta o funda para el colchón, además de la ropa de cama. No duermas sobre un colchón sin cubrir, ya que al transpirar lo mancharemos y haremos que el colchón se deteriore aún más ràpido. Cambia tu ropa de cama cada tercer día o al menos una vez por semana.

Cada que puedas, saca tu colchón al sol, o al menos procura que se ventile con las ventanas de la habitación abiertas, y, en lo posible, con algo de luz solar directa para eliminar los ácaros y olores. Otra idea para eliminar bacterias y mal olor es rociarlos con sprays desinfectantes, así como aspirarlos cada vez que te sea posible.

Además, deberás rotar y dar vuelta el colchón cada 15 días o al menos una vez por mes, de manera que el desgaste del mismo se produzca de forma pareja. Procura no sentarte sobre sus bordes y, claro, recuérdale a los niños que el colchón es para dormir y descansar, no para jugar encima de él como si fuera un trampolín.

Si limpias el colchón periódicamente y tratas de darle el uso adecuado, podrás mantener el colchón en buen estado por mucho más tiempo.